Los collares para gatos no son simplemente artículos estéticos para que tu gato vaya más guapo y le vean presumido. Hay collares que son de mucha utilidad y que pueden ayudarnos a nosotros y nuestras mascotas.
Un ejemplo son los collares personalizados en los que poder grabar el nombre de tu gato, y una dirección o número de teléfono para en caso de que se escape o se pierda pueden contactar contigo rápidamente.
Otro, que es el que vamos a ver a continuación son los collares antipulgas. Estos collares ayudan a proteger a nuestra mascota de parásitos o insectos. No solo los hay para protegerlos de los parásitos que puedan aprovecharse de ellos en un futuro, si no que también los hay para poder desparasitarlos una vez los insectos ya habitan en tu gato.
Hay muchos tipos de collares antipulgas, por ello vamos a explicar cada uno de ellos y ver cuál es el que más le conviene a nuestro gato.
Collares antipulgas
Dentro de los collares antipulgas podemos encontrar muchas variedades. Vamos a centrarnos en las más comunes que podrás encontrar a la hora de buscar un collar antiparásitos.
Collares repelentes
Estos collares son para prevenir. Con uno de estos collares repelentes podemos proteger a nuestro gato durante meses de todo tipo de insectos. Lo mejor de este tipo de collares es que no contiene químicos.
Collares antiparasitos
Estos collares son para usarlos una vez nuestro gato y ya esté con parásitos. Con estos collares los insectos que ahora habitan en el se irán eliminando poco a poco a partir de los 2 primeros días desde que le ponemos el collar. A diferencia del collar repelente, esto está impregnado de insecticida que emite gases tóxicos. Gracias a ello además de eliminar esos insectos también dotar al cuerpo de tu gato de protección durante los próximos meses.
Cada vez son más los que acuden a los collares antipulgas ya que además de efectivos son de los métodos más baratos para desparasitar a nuestro gato o para prevenirlo de ello.
A tener en cuenta…
Cuando le pongamos el collar antipulgas a nuestro gato debemos de hacerlo de manera que no quede ni demasiado apretado ni demasiado suelto.
- Si lo dejamos apretado: El gato se sentirá molesto con él o incluso hacerle daño. Además puede que intente arrancárselo aunque al estar tan ajustado no llegaría a él y puede hacerse más daño.
- Si le dejamos demasiado suelto: En este caso el gato si podría intentar arrancar se lo con la boca pudiendo así intoxicarse o incluso romperse un diente al intentar morderlo. Otro problema que podría surgir si dejamos el collar demasiado suelto y es que queda enganchado en algún saliente de la casa. El gato podría llegar a hogar sé si esto sucede.
En principio esto es algo hay que hay que tener en cuenta pero que no de preocuparnos pues la mayoría de los collares antipulgas ofrecen la posibilidad de ajustar el collar a diferentes medidas. De esta manera nosotros mismos podremos poner el collar de la manera ideal.
Incovenientes de los collares para gatos
Hay que tener cuidado cuando compremos collares antipulgas para gatos. Hay muchos de ellos que contienen productos químicos y que aunque han pasado los controles pertinentes, a la larga pueden ser perjudiciales para la salud.
También es importante que no tengan estos químicos tóxicos aquellos collares que vamos a usar para nuestros gatos cuando en casa hay niños pequeños. Los bebés y niños pequeños tienden a chuparla todo y puede ser un problema tocar el collar del gato y luego llevarse las manos a la boca. Por tanto es importante no solo pensar ya en la salud de nuestro gato sino también en la de nuestra familia.
Otro inconveniente puede ser que nuestro gato se sienta demasiado incómodo con él. Si vemos que no deja de morderlo y está así durante día, puede que acabe perdiendo algún diente al intentar arrancárselo.
Por ello, en este tipo de accesorios para gatos es importante mirar por la seguridad y la salud de nuestro gato más que por la estética